Emile Coué

Publié le par Penissard

 

Si estás sobre una la viga a 800 metros de altitud: imagina que vas a caerte. ¡Caes o te niega a avanzar!


 ¡Tu IMAGEN MENTAL es responsable de tu travesía o de tu caída!


 ¡Cuándo te hace falta confianza en ti mismo, tus IMÁGENES MENTALES orientan tu tranquilidad o tu malestar!


De allí llego el secreto de Émile Coué; tus imágenes mentales (imaginación) ganan siempre sobre tu VOLUNTAD. ¡SIEMPRE! *


tus imágenes mentales (imaginación) ganan siempre sobre tu VOLUNTAD. ¡SIEMPRE!



tus imágenes mentales (imaginación) ganan siempre sobre tu VOLUNTAD. ¡SIEMPRE!


tus imágenes mentales (imaginación) ganan siempre sobre tu VOLUNTAD. ¡SIEMPRE!


 Es inútil utilizar tu voluntad (no quiero ser tímido(a) nunca más), si la imagen que tienes de ti es la falta de confianza en ti mismo (a) (Por ejemplo: Tu imagen de tímido (a).


 Coué concluyó definitivamente sobre el tema con esto:

Si tu voluntad está en oposición con tu imaginación, es siempre tu imaginación la que gana.


En definitiva, tus imágenes mentales dirigen tu vida.


* ¡Tus imágenes mentales dirigen tu bienestar! (o lo contrario)


* ¡Tus imágenes mentales dirigen tu éxito! (o lo contrario)


* ¡Tus imágenes mentales dirigen tu curación! (o lo contrario)


¿Qué pasa con tu voluntad?


Todos hemos aprendidos, pero « hay que querer para llegar a. »


¡Es el secreto de los secretos!


¡Coué reveló que cuando tu imaginación y tu voluntad vienen de par, vas a multiplicar los resultados!


Ejemplo: Quieres dejar de fumar. Tu voluntad es dejarlo (quiero dejar definitivamente de fumar). Tu imagen mental es concordante (te imaginas respirando los pulmones a tope, con mas aliento, en plena forma y liberado). Vas a tener éxito.


¡Ese es el GRAN SECRETO de Émile Coue!


 A propósito, en este momento, ¿qué imagen mental tienes de ti mismo (a)?


Didier Pénissard


¡Inviérte en ti!

 inscripción gratuita a los cursos de desarrollo personal  

Publié dans desarrollo.personal

Pour être informé des derniers articles, inscrivez vous :
Commenter cet article